Los datos arrojados por la investigación realizada a través de la plataforma BBVA Research auguran un crecimiento anual medio de entre 95.000 y 135.000 nuevos hogares. De este modo, las previsiones realizadas a 10 años se sitúan en un aumento de la demanda potencial de vivienda de entre 1 y 1,4 millones.
La plataforma ha hecho hincapié en que se ha pasado de hablar de recuperación a hablar de evolución: «Vivimos en un ciclo de crecimiento y nos vamos a ir metiendo en un terreno en el que las tasas y la evolución se va a ir normalizando», afirma la entidad.
Se espera que regionalmente, Madrid, Barcelona y el Eje Mediterráneo y las Islas serán los mercados que seguirán a la cabeza en términos de volumen, aunque se espera también que se establezca la normalización y moderación tras cuatro años de crecimiento.
Un buen 2017
En lo que respecta a 2017, BBVA Research pone de manifiesto el buen desarrollo del ejercicio. Éste finalizó con 532.000 transacciones, lo que supuso un aumento del 16.3%. Los motivos que avalan este comportamiento son la dinamización económica, la capacidad de creación de puestos de trabajo y el optimismo en los hogares de cara al futuro en términos económicos y de financiación.
En el último trimestre del año hubo una ligera reducción en la venta de viviendas. Aun así, la tendencia se mantuvo al alza. Pese a que el volumen aún está lejos del alcanzado entre 2004 y 2006, se observó que por comunidades autónomas, todas las regiones se alejaron de los niveles mínimos de ventas que se registraron en la crisis.
El mantenimiento del mínimo en los tipos de interés confiere una condición favorable al crédito de cara a comprar una vivienda. La subida del crédito destinado a la compra de vivienda se fija en 17.4% en 2017 y en 11.1% en el primer trimestre de 2018
Se descarta la burbuja
Uno de los encargados de realizar el estudio, Félix Lora, afirma que la situación que existe en España no se corresponde con la posibilidad de que explote de nuevo una burbuja inmobiliaria: La evolución del mercado explica “perfectamente” el nivel de precios.
También aleja las perspectivas de burbuja en el mercado de alquiler, señalando que es “muy relativo” hablar de burbuja debido a que la renta del alquiler está “muy asociada” a la de los hogares. Cuando la renta de los hogares deje de crecer, esto supondrá una normalización de la situación.
Acerca de la situación catalana, la investigación confirma que el impacto que ha tenido la incertidumbre provocada por el conflicto ha sido la esperada y que pese a ser la región más castigada, el buen comportamiento de otras regiones ha compensado la situación global.