Tras casi 30 años de nuevos planes, retrasos y contratiempos, Madrid Nuevo Norte echa a andar. El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid liderado por Isabel Díaz Ayuso aprueba hoy de manera definitiva el proyecto, por lo que el mayor proyecto de regeneración urbana en Europa es ya una realidad. Se prevé que las obras se prologuen durante los próximos 25 años.
El pasado 16 de marzo, la Comisión de Urbanismo de la Comunidad de Madrid aprobó el proyecto, permitiendo la construcción de 10.476 viviendas (de las cuales el 20% serán VPO) y un nuevo centro de negocios entre Chamartín y la M-30 en torno a su nueva avenida principal, Agustín de Foxá. Todo ello contribuirá a una edificabilidad de 2,6 millones de metros cuadrados, a los que habrá que sumar además 390.700 metros cuadrados de parques y zonas verdes. 1,6 millones de metros cuadrados de inmuebles irán destinados a uso terciario. También contará con el rascacielos más alto de España (70 alturas y que podría alcanzar los 330 metros) y la reforma de la estación de Chamartín.
El plan aprobado es el mismo que se acordó bajo el mandato de la anterior alcaldesa Manuela Carmena, que durante su gobierno logró la aprobación de manera unánime de todos los partidos políticos con representación en el consistorio de Madrid.
Madrid Nuevo Norte y su impacto en cifras
Se estima que durante las obras de realización del proyecto se generen 63.000 empleos de manera directa, 31.000 empleos indirectos y 23.000 inducidos.
La inversión dedicada al proyecto se estima por encima de los 7.200 millones de euros, divididos en:
- 2.800 millones de euros que irán a infraestructuras.
- 488 millones en equipamientos públicos.
- 4.000 millones a la construcción de nuevos edificios.
Un camino difícil
Madrid Nuevo Norte ha experimentado un camino complicado hasta hoy. Pasando por varios cambios de nombre, de gobierno, de proyección…
El primer proyecto para la zona de norte de Madrid se ideó en 1991, con Felipe González (PSOE) como presidente del Gobierno; Joaquín Leguina (PSOE) en la Comunidad de Madrid y Agustín Rodríguez Sahagún (CDS) como alcalde de la ciudad. Renfe adjudicó en 1993 los trabajos a Unitaria, empresa inmobiliaria del antiguo banco Argentaria (hoy integrado en BBVA) y la constructora Grupo San José.
Ambas compañías formaron la sociedad Duch para llevar a cabo el proyecto como principal grupo promotor. Más adelante, esta compañía se llamaría Distrito Castellana Norte (DCN). Con el visto bueno de la Comunidad de Madrid, DCN pasará a ser el propietario de los terrenos y deberá pagar 1.200 millones de euros a Adif en los siguientes veinte años.
En un primer momento, se planteaba reformular 620.000 metros cuadrados de superficie y una edificabilidad de 800.000 metros cuadrados. Ahí tenía previsto incorporar 5.000 viviendas y 180.000 metros cuadrados se reservaban a espacios para hoteles, oficinas y comercios.
La entrada de Merlin
El pasado noviembre, la inmobiliaria Merlin adquirió el 14,46% de las acciones de DCN a Grupo San José por 168,9 millones de euros y un préstamo de cien millones de euros.
Precisamente la socimi entró en el accionariado de DCN con la intención de invoucrarse en el proyecto a largo plazo y de aumentar su participación con el tiempo. Así, parece que BBVA decidirá rebajar su exposición a Madrid Nuevo Norte tras las presiones del BCE, que considera que las entidades bancarias deben limitar el capital destinado al sector inmobiliario.
La entrada de la socimi en el accionariado es, en palabras de su propio consejero delegado “financiera y pasiva”, pero en más de una vez ha resaltado su intención de incrementar la participación y el liderazgo del proyecto
Por ahora, Merlin destinará 240 millones de euros en la urbanización de los terrenos. De esos 240, 50 millones se reinvertirán hasta 2022 y el resto más adelante. Para hacer frente a esta estrategia Merlin espera retener más caja y vender activos no estratégicos.