El inmobiliario sigue siendo percibido como una de las principales opciones a la hora de invertir. Así lo corrobora The Wealth Report, el informe anual de Knight Frank.
Por ello, un 25% de las grandes fortunas, aquellas cuyo patrimonio supera los 50 millones de euros, han declarado su intención de invertir en Real Estate en 2021. Además, el 45% ha manifestado estar comprometido con criterios sostenibles en sus inversiones.
El mercado residencial se mantiene activo
En 2020, el sector residencial ha acaparado una inversión de 88.900 millones de euros, lo que supone 354.00 millones menos que en 2019; según la consultora. Pese a este descenso, ha sido uno de los sectores más resilientes, sobre todo en ubicaciones prime. Precisamente, estas zonas prime no han sufrido una devaluación, sino que han experimentado revalorizaciones cercanas al 1,9%.
Humphrey White, director general de Knight Frank, señaló que el 2020 fue un “acelerador de tendencias”. El responsable de residencial, Carlos Zamora, amplió esta información, confirmando el mejor comportamiento de la obra nueva. Situó al cliente nacional como el más relevante y un cambio de preferencia del producto hacia casas, pisos o viviendas unifamiliares en la periferia de las ciudades y con abundantes zonas verdes.
Las grandes fortunas se han convertido en un player que absorbe el 35% de la inversión privada en sector terciario a nivel mundial. Madrid y Barcelona acogen una tipología diferente de estas grandes fortunas: En Madrid son de origen latinoamericano (colombiano, argentino o mexicano) y en Barcelona europeo o asiático.
Según Mark Harvey, director internacional de la consultora, los fondos de inversión se han volcado en este segmento durante 2020. Los vehículos de inversión, también, se han dado cuenta de la nueva demanda y han buscado producto de calidad. El director de inversiones de Squircle Capital, John CR Nery, aseguró que los fondos cuentan con mucha liquidez, pero no les está resultando sencillo encontrar oportunidades en el mercado.
Las oficinas volverán
Humphrey White establece septiembre de 2021 como fecha de vuelta a las oficinas. Pronostica un cambio en el paradigma tradicional de trabajo, pero ve a las oficinas como un punto de encuentro en el que estar varios días a la semana. También sostiene que el comportamiento ha cambiado: “El usuario quiere tener supermercado, gimnasio, salud, vivienda y oficina en un lugar céntrico y cercano. Hay zonas que dejan de tener sentido”.
El director comercial, Jorge Sena, analizó el mercado de oficinas de forma genérica: fortalecimiento del centro de las ciudades, espacios por persona más grandes y la oficina como lugar de reunión. Sobre cuanto sufrió en 2019 aseguró: “No hay nuevas contrataciones, el take up esta por debajo del 50% respecto a 2019. En 2021 hay una tenue recuperación. Estamos a la espera de ver el comportamiento definitivo.”
En la presentación del informe hablaron de zonas concretas. Colocaron al 22@ de Barcelona como “la reinvención de un distrito financiero en el medio de una ciudad”. Por su parte, la capital obtuvo peores comentarios. San Sebastián de los Reyes fue puesto como ejemplo deuna zona que no atrae inversión y está condenada a una reconversión. Aquí fue donde los protagonistas señalaron que las administraciones públicas deben estar preparadas para realizar cambios de usos de oficinas a residencial: “Los hábitos y demandas han cambiado, pero mantenemos los planes urbanísticos. Esto crea un desfase”.
El alquiler es tendencia
The Wealth Report señala que el mercado del alquiler es el que los inversores ven más interesante, incluso por delante del logístico. Esto se debe a los cambios sociales y pérdida del poder adquisitivo. También, ha catapultado modelos como el build to rent.
Humphrey White habló sobre la buena rentabilidad que ofrece este modelo y cómo ha supuesto un valor refugio frente a otros productos de inversión.
Otros protagonistas
El informe revela un crecimiento del 373% en la inversión en supermercados, durante 2020. Esta consecuencia causada por la pandemia se mantendrá con activos urbanos y de proximidad. Las afueras de las ciudades pierden interés.
Por el contrario y como era de esperar debido a la pandemia, el comportamiento de los hoteles fue muy negativo, con caídas del 50% en inversión.
Fuente: brainsre.news