El Real Estate en China comienza a dar signos de recuperación tras la crisis provocada por el COVID-19. La pandemia afectó al sector, que vio reducidas sus ventas hasta alcanzar mínimos a mediados de febrero, según datos de Capital Economics y Knight Frank.
Muchas zonas del gigante asiático han experimentado la reapertura de la actividad económica, que estuvo paralizada por las autoridades como medida para combatir al coronavirus. Las transacciones inmobiliarias ya comienzan a ser cada vez más frecuentes: Según el estudio sobre los 30 mercados más grandes de China, solo en la primera quincena de marzo las ventas de casas aumentaron 8,5 puntos frente al mismo periodo del mes anterior.
Todos los países miran de reojo a China, que lidera la recuperación económica mundial que deberá tener lugar. Economistas de JPMorgan afirman que China va por el buen camino y que «si estamos en lo cierto, China será la primera en entrar y salir de una desaceleración inducida por un virus”.
Millones de personas se mantienen en cuarentena en todos los lugares del globo y la economía ya lo está notando. Los bancos centrales ya trabajan en paliar los efectos de esta situación y los mercados se preparan para los efectos con la esperanza de que no se prolonguen demasiado en el tiempo.
En un estudio realizado por Property EU a 840 expertos del Real Estate a nivel mundial, afirman que pese a la situación, actualmente la inversión en el Real Estate trabaja al 45% de su capacidad habitual.
¿Ocurrirá lo mismo en todos los mercados?
Cada mercado y zona geográfica se rige por unas condiciones inherentes, que no permiten afirmar que lo que acontece en un lugar se vaya a replicar en otro.
«Debemos tener cuidado de hacer comparaciones estrictas entre las diferentes respuestas al COVID-19. La experiencia en Asia sugiere que una vez que los nuevos casos de infección disminuyen hay un aumento relativamente rápido de la actividad, aunque desde niveles muy bajos», afirma Kate Everett-Allen, de Knight Frank.
Sin embargo, China ha demostrado que existe un camino, y el resto del mundo confía en poder seguir sus pasos cuanto antes.